De manera muy clara y resumida, una auditoría energética es el estudio en profundidad de un edificio, ya sea residencial o industrial, con el objetivo de dar a conocer una serie de oportunidades de ahorro y eficiencia energética. Sencillo, ¿no lo crees?
Dicho de otra manera, se trata de la elaboración de un plan de acción, surgido a raíz de un estudio previo, en el que se proponen distintas medidas que podrían aplicarse en un edificio para que el consumo energético sea menor y más eficiente. La mejora y ahorro en el consumo energético repercute directamente en el ahorro económico.
¿Para qué sirve?
Aunque existen multitud de distintos escenarios donde una auditoría energética tiene cabida, la respuesta a esta pregunta se puede contestar de una manera muy rápida y sencilla: Una auditoría energética tiene sentido en todos aquellos lugares donde exista un alto consumo energético y donde exista un gran potencial de ahorro, tanto energético como económico.
Dado el amplio abanico de posibilidades que surgen, en Efficient Solutions lo queremos reducir al mundo de la empresa y a las comunidades de vecinos por los siguientes motivos:
- Son los escenarios donde más energía se consume. Esto hace que, irremediablemente, el potencial de ahorro sea, en muchas ocasiones, enorme.
- Dada la naturaleza de cada una, la inversión a realizar para conseguir una auditoría energética es irrisoria. El coste de llevar a cabo una inversión energética queda amortizado, por término medio, con los ahorros resultantes de los 5-6 primeros meses a partir de la puesta en marcha del plan de acción.
- Al ser escenarios de considerable magnitud, las medidas a incluir en el plan de acción son muy diversas. Desde pequeñas acciones sin coste hasta otras donde surge la necesidad de invertir para su implementación, las medidas propuestas se ajustan en todo momento a las necesidades y recursos con los que la empresa o comunidad de vecinos cuentan.
¿En qué consiste?
Es normal que, una vez se conoce en qué consiste una auditoría energética y todos los beneficios que esta reporta, surjan dudas de cómo llevarla a cabo y quién te puede ofrecer el mejor servicio. Desde la perspectiva del cliente, se trata de un proceso sencillo en el que, únicamente, tendrá que facilitar el acceso a las instalaciones y a los datos pertinentes.
A la hora de realizar una auditoría energética, todos los auditores procedemos prácticamente de la misma manera siguiendo ciertos pasos o etapas. Una vez hayas elegido al auditor que prestará el servicio, que se detallan a continuación:
- 1. Planificación y obtención de los datos
- 1.1. Entrevista y recogida de información
- 1.2. Inspección visual
- 1.3. Cuestionario a usuarios del edificio
- 1.4. Informe preliminar
- 2. Medidas experimentales
- 3. Diagnóstico de la situación
- 4. Análisis para la mejora del comportamiento del edificio
- 5. Propuesta de mejoras
- 6. Emisión del informe final
¿Qué se analiza en una auditoría energética?
Aunque a la hora de realizar una auditoría energética puedes ver que cada técnico analiza cosas diferentes, lo cierto es que existen ciertos puntos que un buen profesional no debe pasar por alto si realmente quiere encontrar oportunidades de ahorro que plasmar en su plan de acción. Desde Efficient Solutions recomendamos que, los puntos a analizar en una auditoría energética sean, como mínimo y siempre que sea posible:
Consumos energéticos
A través de facturas energéticas de periodos anteriores y de los datos que la descarga de contadores arroja, se hace una comparativa entre los datos reales y lo que deberían ser los datos óptimos en un edificio como el analizado. A partir de esta comparativa ya se puede conocer aquel tipo de energía sobre el que habrá que realizar alguna acción de mejora.
Análisis de la red eléctrica
Además del contraste de la realidad que muestra la factura de la luz con el análisis de la red eléctrica, se ha de evaluar la energía reactiva que no se aprovecha para el consumo.
Envolvente
Cerramientos, puentes térmicos, huecos y todos los posibles escenarios por donde se pueden ocasionar pérdidas de energía han de ser analizados. Un mal aislamiento en paredes, vidrios o marcos pueden suponer un gran despilfarro de energía.
Iluminación
En muchas ocasiones, la iluminación en los edificios no es la óptima; se ha de proporcionar, con el menor consumo energético posible, una iluminación suficiente. Para ello, durante la auditoría, se hará inventario de todos los equipos lumínicos existentes de modo que se pueda conocer la potencia consumida y, así, analizar el nivel óptimo.
Climatización y ACS
Otro punto a tratar es el estudio de los equipos de generación existentes, así como los sistemas de distribución. Dependiendo del sistema utilizado, reducir la cantidad del suministro de la caldera puede suponer un enorme ahorro de energía para la comunidad de vecinos o empresa.
Equipos
Realización de un inventario que contemple todos los equipos utilizados tales como equipos eléctricos de climatización y ventilación, calderas, bombas,… para, posteriormente, comprobar que su rendimiento sea lo más óptimo posible. Para asegurar esto, desde Efficient Solutions (y desde la lógica), recomendamos que el mantenimiento de estos equipos sea periódico y que, en caso de ser necesario, se sustituya conforme vayan quedando obsoletos.
Control y gestión
De igual manera, todos los equipos que se utilicen para controlar y gestionar el uso de la energía han de ser revisados para comprobar que, efectivamente, están trabajando y midiendo como se debe. Para conseguir el máximo ahorro, es de vital importancia apoyarse en la informatización y monitorización de los consumos.